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Toni, lleva más de 20 años entre viñas y barricas. Ha trabajado como enólogo en Alella, Ribera del Duero, Priorat; prefiere los proyectos familiares, para poder participar en todas las áreas. De perfil técnico, predomina su lado más visceral, y siempre busca vinos con personalidad, fiel reflejo de sus orígenes.
Para Toni lo fundamental se encuentra en el viñedo y por eso se divierte entre los diferentes terroir y tipos de uvas. Finca Cárdaba, supone conocer una nueva zona, extraer la máxima expresión y llevar un sueño al consumidor.
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Es el hombre multiusos, combina viñedo y bodega. Nació muy cerca de Finca Cárdaba. Su infancia ha transcurrido entre aperos de labranza y viñas, conoce como nadie las necesidades del viñedo, es el responsable de conseguir la uva que necesita Finca Cárdaba y además, se encarga de las tareas de bodega.
Es el más veterano del proyecto, una persona pausada y experimentada que ha ido aprendiendo a base de observar y escuchar. Si tuviéramos que definir a Fernando, sería muy fácil: es un apasionado del terruño.